Como parte del proyecto Somos Tesoro, los trabajadores y trabajadoras de minería artesanal y de pequeña escala (MAPE) han impulsado 4 proyectos para el desarrollo local sostenible.
Desde mediados de 2016, ARM implementa, en el marco del proyecto Somos Tesoro, un concurso de innovación para mineros y mineras trabajando en MAPE, en el que se financian hasta 4 proyectos piloto. Para ello, estos propusieron proyectos dirigidos a mejorar aspectos ambientales y de seguridad en sus minas, así como ideas de mejora para el beneficio de los trabajadores y/o de otros grupos de la comunidad.
ARM les facilitó formatos preconcebidos para presentar estas ideas y les brindó acompañamiento en el proceso. En total, 15 unidades mineras de Boyacá que participan en Somos Tesoro enviaron propuestas y finalmente cuatro fueron seleccionados. Entre los requisitos, los mineros debían responsabilizarse del proyecto haciéndose cargo de la mano de obra y aportando parte de los gastos.
Conexión en línea para el desarrollo local
Este proyecto, aún en construcción, es un punto digital comunitario ubicado en la mina “El Triunfo”, en Tópaga. Para la realización de este, se está levantando un local en las afueras de la mina que será alimentado por energía solar, contiene espacio para 4 computadores y 1 impresora donados por la alcaldía de Tópaga, además de cocina, baño y una pequeña oficina. El local supone un esfuerzo de responsabilidad social que será gestionado y mantenido por los dueños de la mina y que permitirá capacitar de manera online a sus trabajadores y reducir la brecha digital en la comunidad. Fundación Mi Sangre, aliada en el proyecto Somos Tesoro, apoyó pintando el local.
(c) Fundación Mi Sangre
El local fue inaugurado con la comunidad en un evento en el que participó la alcaldía de Tópaga el sábado 2 de diciembre.
Aquí pueden ver una pequeña muestra de la inauguración:
Molino de viento para reutilizar el agua
El segundo proyecto financiado es un sistema que, utilizando un molino de viento, bombea el agua desde la parte interna de la mina a través de un sistema de tratamiento de aguas que después es utilizado para riego, sanitarios y control del polvillo de carbón. Este proyecto beneficia a las minas “Las Lajas” en Gámeza, contribuye a la conservación y mantenimiento del medio ambiente y minimiza los riesgos de enfermedades derivadas de la respiración del polvillo de carbón (material particulado). Con esto, además, se demuestra que es posible reutilizar el agua de la mina –que muchas veces es vertida en las quebradas- utilizando energías renovables. (c) ARM
Reforestación en Sogamoso
El tercer proyecto, otorgado a la mina “Carbonera los límites” en Sogamoso, consiste en un piloto que pretende recuperar las áreas que han tenido mayor impacto por la operación de la mina con acacias, plantas nativas y ornamentales. Este piloto pretende aportar una solución al problema de la acumulación de estériles y servir de ejemplo a otros mineros de la zona.
Un nuevo espacio para la formación y la comunidad
También aún en construcción, este proyecto creará un salón como espacio para realizar capacitaciones de mineros del municipio de Sogamoso. Este proyecto está ubicado en la mina “Diamante Negro” y pretende dar solución a un problema recurrente en la zona: la falta de espacios para que los mineros se capaciten en temas esenciales como la seguridad. Además, también se podrá utilizar como espacio social para celebración de eventos y actividades sociales. (c) ARM
En el concurso, destaca la voluntad de los pequeños mineros que se han involucrado para realizar una minería responsable social y ambientalmente, segura y que ayuda al desarrollo comunitario. Como prueba de ello, es importante destacar que en todos los proyectos mencionados las organizaciones mineras artesanales y de pequeña escala (OMAPEs) pusieron contrapartidas que llegaron hasta casi el 50%.