Durante 4 años (2019-2023), el proyecto SANU KURA proporcionó un camino hacia un futuro prometedor para la minería artesanal y de pequeña escala (MAPE) en Burkina Faso. Financiado por la Unión Europea a través de su Instrumento de Contribución a la Estabilidad y la Paz (IcSP), este ambicioso proyecto logró transformar el panorama minero mediante la creación de canales de producción y comercialización legales y viables. Los resultados son positivos para las comunidades mineras intervenidas en aspectos de la vida económica, social y medioambiental de Burkina Faso.

El proyecto SANU KURA ha tenido un impacto significativo en las comunidades locales, beneficiando a 2.456 personas, entre ellas 982 hombres y 1.474 mujeres. Ha proporcionado un apoyo esencial para la creación de 23 grupos mineros, que comprenden 17 asociaciones y 6 cooperativas (7 asociaciones y 3 cooperativas en el Centro-Norte, 6 asociaciones y 3 cooperativas en el Centro-Oeste y 4 asociaciones en el Sur-Oeste).
El proyecto SANU KURA es un modelo de éxito en la promoción de una minería artesanal y a pequeña escala responsable y sostenible en Burkina Faso. Gracias a sus considerables esfuerzos en los ámbitos de la salud, la seguridad, el medio ambiente, la organización social, la economía y la tecnología, ha dejado una huella indeleble en el desarrollo del país. El impacto positivo de este proyecto perdurará mucho más allá de su cierre en 2023, convirtiendo a Burkina Faso en un ejemplo de minería artesanal y a pequeña escala en todo el mundo.
Conozca los principales impactos positivos que tuvo el proyecto:
Protección del medio ambiente
El proyecto dio pasos importantes para promover técnicas mineras respetuosas con el medio ambiente. Implementó sistemas de gestión de residuos y efluentes en 9 explotaciones mineras, contribuyendo a la preservación de los ecosistemas locales. Además, el proyecto logró reducir significativamente el uso de mercurio en 6 explotaciones mineras, lo que representa un importante paso hacia la sostenibilidad medioambiental.

Mejoras en salud y seguridad en el trabajo
El proyecto SANU KURA situó la seguridad en el centro formando a 36 trabajadores en buenas prácticas de salud y seguridad, incluidos los primeros auxilios. Además, sensibilizó a más de 1.000 trabajadores sobre los riesgos asociados al uso del mercurio, contribuyendo así a proteger la salud de los mineros artesanales. Gracias a este proyecto, se crearon 3 plantas de procesamiento sin mercurio en los sitios mineros de Memer, Guido y Pagdin, y 06 en rotación en las explotaciones mineras (Pagdin, Guido, Bepoidyr, Poa, Urbi y Memer), y llevaron a cabo cruciales campañas de sensibilización sobre los peligros del mercurio.
Además, se suministraron equipos de protección individual (EPI) a cada organización minera para mejorar la seguridad sobre el terreno. El proyecto también puso en marcha protocolos de emergencia y planes de respuesta a accidentes en 9 explotaciones mineras, garantizando una respuesta rápida en caso de necesidad. Además, se llevó a cabo una evaluación médica relacionada con la exposición al mercurio de 9 mineros artesanales, reforzando aún más la vigilancia de la salud.
También se elaboró un informe global sobre la gestión de la pandemia de COVID- 19 en los 10 sitios mineros.

Desarrollo socio-organizativo
El proyecto elaboró 3 planes de acción local multiactores basados en el debate y el compromiso de los distintos agentes implicados en la gobernanza local. Además, permitió elaborar y validar 10 planes de mejora para cada explotación minera, que abarcan aspectos como los derechos humanos, la salud reproductiva, la gobernanza comunitaria, la educación financiera, la salud, la seguridad y la higiene en el trabajo.
Por otro lado, el proyecto formó a 45 funcionarios y agentes del sector público en normas de conducta empresarial responsable en relación con los minerales de conflictos y la extracción de otros recursos naturales.
Se desarrolló una estrategia de comunicación participativa para sensibilizar sobre los temas prioritarios para las comunidades mineras y se organizaron programas interactivos de radio y televisión.
Cadena de suministro, tecnología y oportunidades económicas
El Proyecto SANU KURA ha abierto nuevas perspectivas económicas para los mineros y mineras artesanales, en particular la creación de oportunidades económicas en el sector de la minería artesanal a través de la conexión con el mercado formal sobre la base de modelos de producción responsable – CRAFT o FAIRMINED – que responden a las expectativas del sector.
Como resultado, el 60% de los sitios mineros han mejorado considerablemente su nivel de formalización en relación con el Código CRAFT y el Estándar Fairmined. Como resultado, se han formalizado más de 1.000 puestos de trabajo parcial o totalmente formales en las explotaciones piloto y en actividades relacionadas. Esto representa un avance importante y responsable para el sector de la minería artesanal de oro en Burkina Faso.
Además, 500 mujeres recibieron formación en saponificación, educación financiera, elaboración de planes empresariales, procedimientos de solicitud de créditos y apoyo a la cría de aves de corral y pequeños rumiantes mediante dotaciones, reforzando así sus conocimientos y su capacidad para prosperar en el sector.
El proyecto también ha contribuido a mejorar la cadena de suministro de oro identificando a los actores, impartiendo formación sobre el Código CRAFT, fortaleciendo la trazabilidad del oro producido y cumpliendo los requisitos del mercado formal del oro en el caso de Memer.
Por último, el proyecto SANU KURA ha adoptado tecnologías innovadoras para optimizar los procesos mineros, el desarrollo de métodos de tratamiento de minerales respetuosos con el medio ambiente y la aplicación de soluciones tecnológicas para la gestión de datos mineros con la plataforma digital MAPE Progress App.