Para la Alianza por la Minería Responsable (ARM), el año 2018 finalizó con algunas noticias alentadoras, tales como el aumento de 8 a 11 organizaciones mineras artesanales y de pequeña escala certificadas con el Estándar de Minería Justa Fairmined (en Colombia, Perú y Mongolia), o el aumento del volumen de oro certificado Fairmined respecto al año anterior. Podemos considerar estos resultados de manera muy positiva, dadas las múltiples barreras externas que afectaron a mineras y mineros y que influyeron en el proceso de que estos consiguieran acceso al mercado internacional. Algunas de estas barreras fueron la prohibición del uso de mercurio en Colombia -y su uso enmarcado con disposiciones muy estrictas en Perú-, o la incapacidad de que organizaciones certificadas Fairmined pudieran abrir cuentas bancarias. Paralelamente, este pasado año logramos con éxito, y de la mano de muchos aliados en Colombia y a nivel internacional, el lanzamiento del código CRAFT. Además, pudimos hacer también la demostración piloto de su eficiencia, facilitando el acceso al mercado nacional por parte de un grupo de mujeres mineras. Estos éxitos resultan, en gran parte, del esfuerzo intenso que el equipo y los aliados de ARM han realizado a lo largo del año, mostrando flexibilidad y adaptación a cambios organizacionales, mejoramientos de procesos y metodologías y compromiso para generar y medir impacto.

Programa Fairmined

Nuestra acción se va a concentrar primeramente en el crecimiento del programa Fairmined . Esto se hará fomentando el aumento de la disponibilidad de oro certificado Fairmined para el mercado, así como intentando expandir el modelo en otros territorios mineros.  Nuestro trabajo de acompañamiento a los mineros y mineras nos enseña que a menudo aparecen nuevas dificultades administrativas y barreras a la formalización y la comercialización en casi todos los países donde trabajamos, por lo que trataremos de estar aún más cerca de los mineros/as para mejorar su experiencia de formar parte de cadenas de suministro responsables.

Este año 2019 va a ver también la evolución del Estándar Fairmined hacia la versión 3.0 que, tras 5 años de experimentaciones y práctica real, integrará la retroalimentación de distintos aliados que adoptaron el modelo, e incluirá nuestra propia experiencia y la de miembros de la cadena de suministro Fairmined. Sin duda, este va a ser un momento de reflexión muy interesante y portador de innovaciones.

Código CRAFT
 

La acogida exitosa del código CRAFT versión 1.0, el pasaporte de entrada a mercados formales, nos obliga a acompañar a nuestros aliados en el desarrollo de materiales y prácticas que permitan la creación de cadenas de suministro bajo este instrumento. Esto también nos exige pro-actividad en desarrollar propuestas que facilitan la sostenibilidad del modelo, que será un objetivo mayor con nuestro aliado Resolve.

Contribuiremos al ensayo de este estándar de entrada  en varios entornos y lugares del planeta, lo que será valioso para su consolidación, en la segunda consulta pública que tenemos prevista durante el año y que llevará a tener una versión final de CRAFT.

Estos dos programas por los que trabajamos, CRAFT y Fairmined, inducen estrategias diversas que necesitamos seguir para conseguir resultados sostenibles.

Primero, la estrategia con enfoque territorial, que ha mostrado ser efectiva, por ejemplo en la creación de relaciones a largo plazo, y ha aumentado nuestra capacidad de desarrollar programas que alcanzan sus objetivos. Por ello, queremos continuar construyendo estas relaciones que permiten integrar el componente de minería artesanal y de pequeña escala (MAPE), y limitar nuestro trabajo enfocado en el desarrollo sostenible a territorios donde podemos visualizar una presencia a largo plazo  . Así, queremos crear buenas condiciones de trabajo y presencia en África del Oeste, donde iniciaremos un proyecto en Burkina Faso, así como también queremos reforzar nuestros equipos en Colombia, Bolivia, Honduras y Perú.

Estamos también convencidos/as que la expansión de los modelos Fairmined y CRAFT se hará mediante colaboraciones estrechas con organizaciones terceras que desean utilizarlos en sus proyectos de apoyo a mineras y mineros artesanales y de pequeña escala. Nos comprometemos en iniciar este trabajo a largo plazo para facilitar la adopción de los dos programas por medio de otras iniciativas no directamente lideradas e implementadas por ARM.

Como otros actores, buscamos también mecanismos que tienden a involucrar los actores de las cadenas de suministro en el trabajo hacia mejores prácticas, la reducción de riesgos y la formalización efectiva de mineras y mineros. Por esto, trataremos de diversificar nuestras fuentes de financiamiento, proponiendo más colaboraciones con actores de la cadena.

Estamos también convencidos/as que la expansión de los modelos Fairmined y CRAFT se hará mediante colaboraciones estrechas con organizaciones terceras que desean utilizarlos en sus proyectos de apoyo a mineras y mineros artesanales y de pequeña escala. Nos comprometemos en iniciar este trabajo a largo plazo para facilitar la adopción de los dos programas por medio de otras iniciativas no directamente lideradas e implementadas por ARM.

Como otros actores, buscamos también mecanismos que tienden a involucrar los actores de las cadenas de suministro en el trabajo hacia mejores prácticas, la reducción de riesgos y la formalización efectiva de mineras y mineros. Por esto, trataremos de diversificar nuestras fuentes de financiamiento, proponiendo más colaboraciones con actores de la cadena.

Ya para finalizar, consideramos estos desafíos significan un incremento de personal y una necesidad de reorganización. Adicionalmente, ARM cuenta ya con la sucursal de “ARM Europa”, el rol de la cual será de supervisar las actividades en África y también, estando más cerca, facilitará la relación con nuestros aliados en Europa. Este aspecto del desarrollo de ARM genera un desafío interno y estimulante, y no de los pequeños: el de perseguir el mejoramiento organizativo, cuidando y fomentando la cultura organizacional – el “espíritu de ARM” – para reflejar los principios que guían nuestra acción. Así, con todos estos retos, seguimos caminando juntos – equipo y junta directiva – con muchas ganas de seguir trabajando con esfuerzo por una MAPE responsable y sostenible. ¡Vamos a tomarnos este nuevo año con mucho ánimo y energía y les agradecemos que nos acompañen!

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