Nuestro país es rico en minerales y cuenta con una gran tradición orfebre, la cual proviene desde los inicios del Perú antiguo. Fueron precisamente las culturas pre-incas las que definieron a Perú como una de las cinco cunas metalúrgicas del mundo.

Inspiradas por este increíble legado y por la belleza de las piedras peruanas, lo cual logramos engranar casi naturalmente con nuestra vena creativa, decidimos crear SISSAI (2011), una marca peruana de joyas única que rescata diversos elementos para transformarlos en piezas que resaltan la maravillosa herencia orfebre de Perú, con un mensaje y concepto propio: Trazos imponentes y geométricos, estilo, elegancia, frescura, materiales peruanos y la dedicación de nuestros artesanos en cada pieza.

Desde los inicios de SISSAI, siempre tuvimos la visión de crear una empresa con un valor diferencial sostenible y cuyo fin fuera generar desarrollo en Perú. Es así como llegamos a Fairmined[1], una certificación que nos permitiría contribuir de manera directa con las comunidades mineras artesanales que han apostado por la protección del medio ambiente.

Logramos licenciarnos con Fairmined en el año 2016, convirtiéndonos en la primera joyería en Perú en contar con oro y plata certificados, provenientes de la minería artesanal responsable.

[1] Fairmined: Certificación internacional que garantiza protección ambiental y condiciones de trabajo dignas y seguras, generando desarrollo social y organizacional en mineras artesanales y sus comunidades.

A principios del 2018 renovamos nuestro compromiso con la Alianza por la Minería Responsable (ARM), apostando por trabajar con oro certificado como el Oro Ecológico Fairmined. Este fue un paso más para el cumplimiento de nuestro compromiso con el desarrollo de la minería artesanal responsable, de la mano con la protección del medio ambiente, permitiendo así que artesanos peruanos encuentren espacios en donde plasmar y hacer florecer su talento.

Así también, siendo conscientes de que el papel de la mujer en el desarrollo de las sociedades es fundamental, hemos estado trabajando en encontrar los medios para capacitar a mujeres artesanas y brindarles espacios para que desarrollen su talento.

Este año, junto con ARM y Colorado School of Mines, hemos implementado el primer taller de capacitación en joyería para mujeres mineras de Puno. Gracias a este taller, hemos aportado al empoderamiento de un primer grupo de mujeres, las Bateadoras de Puno (denominadas de ese modo por el trabajo que realizan)[2], brindándoles la posibilidad de desarrollarse como personas, incrementar sus ingresos y mejorar su calidad de vida y la de sus familias.

Este ha sido un logro muy importante para nosotras como peruanas y como marca, el cual esperamos pueda replicarse en diferentes zonas de nuestro país generando, así, mejores oportunidades para futuras generaciones.

[2] Personas que realizan labores de bateo, es decir lavar el oro para separarlo de las arenas usando mercurio. Las bateadoras identificadas por ARM hacen parte de la central de cooperativas CECOMIP, en Puno.

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